En un bol ponemos los huevos y el azúcar y batimos con ayuda de una varilla hasta que espumen y se disuelva el azúcar.
Paso 2:
Añadimos el aceite y la ralladura de medio limón, seguimos batiendo.
Paso 3:
Añadimos poco a poco la harina mezclada con las gaseosas. Mezclamos todo bien amasando dentro del bol si es preciso con las manos.
Paso 4:
Tiene que quedar la masa un tanto pegajosa así para que sea mas fácil nos untaremos las manos en aceite para poder manejarla mejor a la hora de formar los rollos.
Paso 5:
Para formar los rollos, vamos cogiendo porciones de masa de tamaño aproximado de una pelota de ping pong y la colocamos en la bandeja del horno con papel vegetal engrasado y con bastante espacio entre ellos, ya que al hornearse doblan su volumen .De forma tradicional con el dedo presionamos en el centro y giramos haciendo el agujero y dándole la forma.
Paso 6:
Batimos el huevo y pintamos los rollos, los espolvoreamos con azúcar y metemos en el horno previamente calentado a 180º durante 20-25 minutos.
Cuando doblen su volumen y estén doraros ya están listos para sacar. Dejar enfriar encima de una rejilla.