Paso 1:
Una vez que has quitado los rabos de los champiñones y los has lavado bien, échales por encima el zumo de medio limón. Simplemente los pones en una fuente para el horno y los rellenas de queso rallado y un poco de mantequilla por encima. Los tienes 15 minutos en el horno a fuego medio.
Paso 2:
Mientras, los tallos de los champiñones, bien limpios de tierra, los cortas a trocicos y los pones a freír en una sartén con un poco de sal. Cuando están listos, incorpora unos palitos de cangrejo cortados a láminas. Un par de vueltas y retira del fuego.