Limpiamos y troceamos las verduras.
Calentamos el aceite y pochamos la zanahoria con el puerro; cuando esté listo añadimos la calabaza y rehogamos un par de minutos. Salpimentamos.
Paso 2:
Cubrimos las verduras con un poco de caldo de carne o verdura, o incluso agua. Tapamos la cazuela y cocinamos durante 30” aproximadamente desde que empiece a hervir. Pasado el tiempo comprobamos, pinchando con un tenedor, que la calabaza está tierna.
Paso 3:
Sacamos del fuego, añadimos el queso fresco o los quesitos y la naranja limpia, sin piel y troceada. Trituramos la mezcla con la batidora y servimos bien caliente.
Podemos acompañar la crema de calabaza y naranja con unos picatostes, un poco de nata, aceite de oliva, pipas, o taquitos de jamón frito.
“Este tipo de cremas congelan perfectamente si no llevan patata,
así que puedes preparar cantidad sin problema y dividirla en varias raciones para otros días”