Paso 1:
Ay... ¡PERO QUÉ RICO!
Veamos, en una cazuela hervimos la leche con el azúcar y la vaina de vainilla abierta en canal con cuidado de que no se pegue al fondo, o sea, que con el fuego bajito y removiendo de vez en cuando.
Mientras tanto, disolvemos la cucharadita de Maizena con un chorritín de leche en un bol grande, al cual añadimos los 2 huevos y batimos bien.
Paso 2:
Una vez hervida la leche la retiramos del fuego, colocamos un colador en el bol y la colamos (o sea que la volcamos en el bol y tal).
Se remueve y se vuelve a poner dentro de la cazuela y ésta en el fuego, bajo.
Removemos con una batidora de varillas hasta que espese y cuando esto ocurra lo repartimos en 4 cacharritos y les ponemos una galleta por encima.
Esto se tapa con film de plástico y al frigo, amigos.