Paso 1:
Batimos la mantequilla a punto de pomada con el azúcar hasta que consigamos una mezcla espumosa y apetitosa que podríamos untar en unas rebanadas de pan y no lo vamos a hacer no, vamos a añadir las yemas de una en una sin dejar de batir.
Acto seguido incorporamos la harina tamizada y la canela. Trabajaremos la masa hasta que no tenga grumos y quede lisa.
Batimos las claras a punto de nieve, añadimos la levadura y la agregamos a la primera masa, poco a poco para que no se baje, pero sin dejar de mezclar.
Rellenamos unos moldes de papel y los horneamos (con el horno precalentado a 180º) unos 18 minutos.
¡A DESAYUUUNAR!