Hervimos mis amadas y alabadas judías en agua con sal unos 10 minutitos y las escurrimos.
Limpiamos las setas, las cortamos en trocitos y las salteamos en el aceite (también se puede hacer con mantequilla pero es que a mí me gustan más las grasas insaturadas, manías que tiene una).
Salamos y añadimos el queso rallado y las judías, tan verdes, tan monas, y rehogamos unos 2-4 min.