Paso 1:
Lava y pela las verduras, y trocéalas. Pon a cocer todo: el calabacín con la zanahoria, la patata y la cebolla. No es necesario que el agua lo cubra. Cocina a fuego medio hasta que veas que está tierno.
Busca un recipiente adecuado para batirlo todo, junto a dos quesitos. El agua de la cocción puedes reservarla e incorporarla conforme vas batiendo hasta conseguir la densidad que te gusta en la crema. Echa un poquico de sal, a tu gusto, y listo para comer.
Ummm!