Paso 1:
Limpia los mejillones. Pon el vino en una cazuela y añádelos. Tápalos y cuécelos hasta que se abran. Separa las conchas de la carne y pícala.
Pica finamente la cebolla y el pimiento y pon a pochar en una sartén con una cucharada de aceite. Agrega las guindillas de cayena y cuando esté bien pochado, retira las guindillas e incorpora la carne de los mejillones y la salsa de tomate. Cocina todo brevemente y deja templar.
Para la bechamel, pon 2 cucharadas aceite en una sartén, añade 2 cucharadas de harina, rehógala bien y vierte la leche (fría) poco a poco sin dejar de batir. Cocina hasta que espese y agrega el perejil picado.
Rellena las cáscaras de mejillón con la farsa y cúbrelos con la bechamel. Deja que la bechamel endurezca y pásalos por harina, huevo y pan rallado. Fríelos en una sartén con aceite, escúrrelos sobre papel absorbente de cocina.