Separamos las yemas de las claras, batimos las yemas por separado y ponemos las claras a punto de nieve.
Paso 2:
Mezclamos el azúcar con la margarina hasta que la margarina esté bien desecha.
Añadimos las yemas ya batidas e incorporamos poco a poco la harina junto con la levadura. Batimos bien para que no queden grumos e incorporamos cuidadosamente las claras a punto de nieve.
Paso 3:
Añadimos la ralladura de cáscara de limón y mezclamos bien.
Paso 4:
Ponemos la mezcla en un molde previamente engrasado con margarina y horneamos a fuego medio durante media hora aproximadamente.