Paso 1:
La noche anterior, preparamos la gelatina con las instrucciones del fabricante, solo que ponemos la mitad del líquido. la vertemos en un recipiente ancho y dejamos en la nevera hasta el día siguiente.
Hidratamos las hojas de gelatina en agua fría y reservamos.
En un cazo ponemos la nata, no paramos de remover hasta que el chocolate este totalmente disuelto, escurrimos las hojas de gelatina y las incorporamos en el chocolate, removemos hasta que se deshaga, retiramos del fuego y agregamos la leche y el azúcar.
Con un corta pastas de corazón o con la forma que nos guste, cortamos la gelatina que teníamos en la nevera, la colocamos en la copa y vertemos
la crema de chocolate cuando este tibia.
La servimos en copas con nata montada.