Paso 1:
Precalentar el horno a 180º C. Untar los pimientos con un poco de aceite. Asar en el horno los pimientos y los ajos hasta que la piel de los pimientos empiece a oscurecerse. Retirar, esperar a que templen tapados y pelarlos.
Poner un cazo con cuatro cucharadas de agua al fuego. Antes de que hierva retirar, añadir la gelatina y remover bien. En un cuenco mezclar el requesón con los ajos asados previamente pelados, la sal, pimienta, un poco de aceite de oliva y la gelatina.
Cortar los pimientos en tiras. Picar las aceitunas. Forrar un molde con papel film. Poner una capa fina de la mezcla de requesón y cubrir por encima con una capa de pimiento rojo. Repetir la misma operación con el pimiento verde y las aceitunas picadas. Meter a la nevera y dejar que cuaje tres o cuatro horas. Desmoldar.