Paso 1:
Desmenuzar la base del bizcocho y mezclarla con un poco de mantequilla. Presionar la mezcla en el fondo de un molde desmontable.
Hidratar las hojas de gelatina en un bol con agua fría. Reservar.
En un cazo, calentar la leche y la nata con los caramelos y, sin dejar de mover, mantener a fuego suave hasta que los caramelos se derritan por completo. Ponen unos granos de pimienta rosa y retirar cuando se fundan los caramelos.
Apagar el fuego y dejar enfriar.
Añadir las hojas de gelatina bien escurridas, batir enérgicamente para que se deshaga, y añadir el chocolate. Mover con las varillas hasta conseguir una masa homogénea.
Incorporar el queso de untar y seguir batiendo hasta conseguir que quede incorporado. Dejar enfriar e incorporar la nata montada con movimientos suaves y envolventes, para que no se baje mucho.
Poner sobre la base que estaba reservada y guardar en el frigorífico al menos 24 horas.
Para la cobertura:
Disolver la Maizena en un vasito de agua. Calentar la leche y un poco de azúcar, al gusto.
Cuando esté bien caliente añadir la Maizena y remover; dejar que arranque a hervir para que espese. Apartar del fuego y añadir el chocolate. Batir bien y dejar enfriar un poco antes de extenderlo por la superficie de la tarta.
Luego, volver a meter en el frigorífico.