Paso 1:
Pela y corta los ajos en láminas y dóralos en una cazuela con 8 cucharadas de aceite de oliva y un trocito de guindilla.
Antes de que el ajo se dore excesivamente, agrega las angulas y rehoga brevemente sin parar de remover.
Sirve las angulas en una cazuela de barro (previamente calentada).