Paso 1:
Elaboración
Lava bien los calabacines, corta los dos extremos y a continuación córtalos en bastones.
Pon una cazuela baja o sartén amplia a calentar con dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Pela el diente de ajo y pícalo. Cuando el aceite esté caliente incorpora el ajo y los calabacines, salpimenta al gusto y saltea unos minutos, hasta que empiecen a tomar color pero sin llegar a ablandarse.
Añade la salsa de tomate y baja a fuego medio, cocina unos minutos, la salsa ya está cocinada así que el tiempo dependerá de si te gustan los calabacines muy cocidos o algo tersos. Antes de retirarlos del fuego añade las aceitunas deshuesadas y cortadas en rodajas.
Lava y seca bien el perejil y pícalo, repártelo sobre los calabacines