. Lavamos el calabacín y lo cortamos en rodajas muy finas.
Mezclamos 3 cucharadas de harina con 2 cucharadas de pimentón dulce.
. Vertemos las rodajas de calabacín dentro del cuenco y mezclamos con cuidado para que se impregnen bien.
A continuación pasamos las rodajas de calabacín por huevo batido.
Y por último mezclamos 4 cucharadas de pan rallado y 6 cucharadas de queso parmesano, un poquito de pimienta y sal al gusto. Rebozamos las rodajas de calabacín
Preparamos una bandeja de horno con papel de hornear y disponemos las rodajas de calabacín.
Llevamos al horno a 200ºC hasta que las chips de calabacín rebozado estén doraditas.
Podéis freírlas, aunque horneadas son más ligeras y están deliciosas