Paso 1:
Preparamos la gelatina siguiendo las instrucciones del fabricante.
La volcamos en el molde donde la vallamos a preparar y la introducimos en el frigorífico, la dejamos en el varias horas hasta que empiece a ponerse un poco espesa sin llegar a cuajar del todo.
Troceamos las frutas y las mezclamos con la gelatina removiéndolas con una cuchara, la volvemos a meter en la nevera durante seis horas más.