Paso 1:
Rallamos el queso y calentamos la leche en el microondas.
Ponemos la mantequilla en un cazo a fuego medio y cuando esté caliente añadimos la harina y removemos bien hasta que esté doradita.
Añadimos poco a poco la leche mientras removemospara que no se pegue. Añadimos una pizca de sal, retiramos del fuego y añadimos el queso rallado. Removemos para que se mezcle y dejamos enfriar hasta el día siguiente.
Picamos los kikos, hacemos bolitas de masa y las rebozamos, primero por huevo y luego por los kikos molidos. Freímos en aceite bien y retiramos a papel absorbente.