Paso 1:
Cocemos las zanahorias en trozos con una pizca de sal y la cáscara de naranja hasta que estén tiernas. Retiramos la cáscara de naranja, escurrimos y trituramos. Dejamos enfriar y reservamos.
Colocamos en un bol las yemas con el azúcar y el zumo de naranja. Batimos 5 minutos.
Tamizamos la harina y la mezclamos con la levadura.
En otro bol montamos las claras a punto de nieve.
Incorporamos la harina a la crema de las yemas junto con el puré de zanahorias, mezclamos bien con unas varillas y poco a poco vamos incorporando las claras montadas. Con movimientos envolventes.
Calentamos el aceite en una sartén.
Cogemos una cucharada de masa y con la ayuda de otra cuchara la empujamos. Cuando suba a la superficie, le damos la vuelta. Freímos hasta que estén doradas.
Una vez fritas colocamos sobre papel absorbente y dejamos escurrir.
En un plato mezclamos la canela y el azúcar y rebozamos las bolitas.