En un bol amplio, ponemos el cava y el sorbete de limón.
Batimos suavemente con las varillas hasta que se mezcle bien pero procurando que no pierda la consistencia.
Paso 2:
Batimos la clara de huevo a punto de nieve con una pizca de sal para que no se baje.
Paso 3:
Mezclar cuidadosamente el sorbete con cava con la clara de huevo hasta conseguir una mezcla homogénea.
Paso 4:
Servimos el sorbete en copas o vasos que habremos metido previamente en el congelador y adornamos con unas hojas de menta.