Paso 1:
Extendemos la pasta quebrada y la ajustamos a nuestro molde, en mi caso como eran rectangulares tanto la lámina como el molde no tuve problemas. La colocamos en el molde subiéndola un poco por los borde y la pinchamos bien con un tenedor, la tapamos con un papel de horno y la introducimos en el horno precalentado unos 200ºC durante 10 minutos.
Paso 2:
Lavamos las berenjenas, las cortamos en dados y los dejamos en un bol con sal una media hora, para que pierdan el amargor. Después las aclararemos con agua fría y las escurriremos.
Paso 3:
Picamos la cebolla fina y la ponemos a dorar en un poco de aceite a fuego suave. Cuando ya esté dorada añadimos los ajos también picados y la berenjena, salpimentamos y dejamos dorar a fuego lento.
Paso 4:
En un bol mezclamos los huevos con la nata y el queso a trozos, luego añadimos el sofrito. Lo mezclamos bien y lo echamos por encima de la masa quebrada bien repartido.
Paso 5:
Horneamos una media hora a 180ºC.