Lo podemos usar para edulcorar bebidas, postres, yogures, infusiones, incluso el café. Lo guardamos en un tarro de cristal, y a la nevera. Aguanta varias semanas.
Ponemos los dátiles a remojo con el agua, unas pocas horas, lo justo para que se ablanden. Cuando veamos que están listos los trituramos. Tiene que quedar como una crema espesa, como una mermelada o algo así.