Paso 1:
Trocear el chocolate bien fino y picar los arándanos. Llevar la nata a ebullición y retirar del fuego. Añadir el chocolate para que se funda y condimentarlo con canela. A continuación incorporar los arándanos y mezclar.
Verter la masa en un molde cuadrado (12 x 12 cm.) recubierto con film transparente y guardar en el frigorífico durante 2 horas como mínimo para que se endurezca.
Desmoldar, retirar el papel film y cortar la masa en 36 cuadrados (de 2 x 2 cm.). Volver a refrigerar la masa durante 1 hora como mínimo.
Picar por separado los dos tipos de chocolate de cobertura en trozos pequeños y fundir al baño María en distintos recipientes. Cubrir 18 cuadrados con el chocolate con leche y los otros 18 con chocolate negro; dejar escurrir bien. Después, colocarlos sobre papel para hornear.
Si se desea, decorar con un arándano y dejar secar. Conservar refrigerado.